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(pido disculpas por la calidad de imagenes en esta review, accidentalmente eliminé las fotos de los K371 así que publicaré algunas capturas de la versión de la review en YouTube)
Intro…
Los AKG K371 son unos auriculares que se anuncian como auriculares de estudio plegables con un sonido preciso y neutral, y con una respuesta en frecuencia extendida. Llevan en venta un par de años y se han convertido en una recomendación común para los que buscan unos auriculares cerrados y económicos, junto con su hermano pequeño (y más económico), los K361. Los K371 están disponibles actualmente en Amazon por poco más de 100€.
Sinceramente, no he tenido tiempo últimamente para producir música y hace mucho que no piso un estudio (antes de Covid) así que mi review de estos auriculares se basa en utilizarlos solamente para reproducir música, por placer, no como una herramienta que es la función principal para lo que se anuncian.
Presentación...
Los K371 llegan en una caja típica de cartón, con una imagen de los auriculares en la portada y varias especificaciones e información distribuida por el exterior.
Al abrir la caja, se encuentran los auriculares en una forma cortada y doblada de cartón. Hay un adaptador de 3.5mm a 6.35mm en otro recorte (bueno, más bien un agujero) en la parte de arriba.
Debajo de la capa superior de cartón, encontramos el típico manual de usuario junto con una bolsa de tela con 3 cables. Los 3 cables incluidos son uno corto y recto, otro más largo también recto y uno tipo muelle, todos ellos acabados con un conector mini XLR de 3 pins en la parte de los auriculares y un conector TRS de 3.5mm en la otra punta.
La presentación no es nada especial pero incluir 3 cables diferentes es un bonito toque y mientras que la bolas no protege a los auriculares de golpes y caídas, si los protege del polvo cuando no se utilizan y sirve para transportarlos, siempre que no los golpees demasiado.
Construcción y estética...
Empiezo con la estética. Son unos auriculares simples que no resaltan entre tantas otras alternativas económicas, excepto quizás por el mecanismo de plegado. No son algo que me llamaría la atención pero tampoco son para nada ofensivos, así que no tengo queja.
En cuanto a calidad de construcción, aquí es donde he oído quejas de otras personas pero en la semana que llevo utilizándolos no he tenido problemas.
El mecanismo de plegado es diferente al sistema utilizado por tantos otros auriculares plegables. En el caso de los K371, utilizan un sistema de eje para pivotar las copas sobre sí y meterse entre la diadema. El mismo punto de pivote se utiliza para la extensión de la diadema, estirándose hacia abajo. La diadema parece ser hecha de plástico (está recubierta con una piel de imitación así que no puedo asegurarlo) y los brazos de extensión están hechos de metal, lo cual aumenta un poco el peso de los auriculares. Como he dicho, no he tenido problemas pero puedo ver que el punto de pivotaje sea la parte más endeble.
Las copas no tienen una gran cantidad de ángulo ni ajuste pero es suficiente, al menos para mí personalmente. Los que tengo tampoco hacen ruidos ni crujidos, algo que he oido comentar por otros, pero de nuevo, puede ser que aparezcan con el tiempo, no lo sé.
En cuanto a confort, pues no los encuentro muy cómodos. Obviamente esto es algo personal pero el acolchado de la diadema es insuficiente en mi opinión, resultando en un punto caliente encima de mi cabeza.
La almohadillas tampoco son muy gruesas y con la fuerza de la diadema (recuerda que aún son nuevos) se comprimen lo suficiente para que mis orejas toquen el driver que están recubiertos de una tela fina y transparente.
Sin embargo, el peso está bien, no son pesados pero tampoco son tan ligeros como para parecer falsos.
Una de las cosas positivas del sistema de pivote es que se puede plegar una copa hacia atrás mientra que aún llevas los auriculares bien puestos. Esto es algo útil para los DJ’s, o simplemente para monitorizar una pista mientras tienes el otro oído libre.
Sonido...
Déjame empezar diciendo que estos auriculares son muy fáciles de alimentar. Con una impedancia de 32 Ohmios y una sensibilidad de 114dB, se alimentan con cualquier cosa. Los he utilizado con mi teléfono, con DACs tipo dongle, con un M0 y también con los habituales Atom y Heresy, todos alimentandolos fácilmente y sin afectar el sonido en general (bueno, excepto por mi teléfono que no suena genial pero no es culpa de los auriculares).
Comparados con los otros auriculares cerrados económicos que tengo a mano, los AudioTechnica M40x y los Beyerdynamic Custom Studio, estos (los K371) son mucho más fáciles de alimentar.
Los subgraves en los K371 se extienden bastante bien, aunque no es muy suave. Parece tener un escalón conforme se va bajando de frecuencia, como si tuviera 2 “bass shelves” aplicados. No es algo demasiado horrible pero si que se puede notar en canciones que tienen mucho movimiento en los subgraves. En comparación, los subgraves de los M40x son casi inexistentes y no es justo comparar con los Custom Studio debido a las diferentes opciones de afinación de graves.
En general, las frecuencias graves son elevadas pero no demasiado exageradas. Los encuentro bastante placenteros para mucha de la música que depende de los graves, como la EDM etc. Sin embargo, si una grabación tiene muchos graves, pueden resultar sobrecargados para mis gustos, pero hay que recordar que no soy un bass head.
La calidad de los graves no es espectacular pero es más que aceptable para unos auriculares en este rango de precios. Las cosas no están, digamos, altamente definidas en los graves pero la suavidad puede funcionar bien para canciones con golpes sencillos en los graves. Sin embargo, cuando hablamos de música que tiene mucho movimiento en los graves, como metal con afinados drop etc., encuentro que se pueden emborronar mientras que hacen un sobreesfuerzo para mantener la velocidad de las líneas rápidas de bajo. Escuchando líneas de bajo más “normales”, como puede ser “No Ordinary Love” de Sade, no dan tanta sensación de exagerados pero siguen sin ser tan definidos como me gustaría.
La transición hacia los medios no es para nada malo, especialmente en este rango de precios, y los medios de estos auriculares son muy agradables en mi opinión. Mientras que si tienen una pequeña caída en los medios, no tienen falta de presencia y las voces suenan muy naturales. He escuchado el álbum “Graceland” y hacen muy buen trabajo de retratar las voces tanto de Paul Simon como los coros. En general, los medios suenan muy limpios y diría que son mi parte favorita de los K371.
En los medios altos, los K371 caen suavemente hacia su punto más bajo, sobre los 4kHz, sin que eleven los 3kHz. En comparación con los M40x, estos suenan mucho más naturales. Mantienen la presencia de las voces sin que parezcan bruscas.
La zona alta de los K371 quizás sea un poco más oscura de lo que me gustaría pero, de nuevo, no son nada malos para unos auriculares de este tipo y a este precio. Sí he echado en falta un poco más de aire en una gran cantidad de canciones pero esto es preferencia personal y probablemente no sea lo que busquen la mayoría.
En cuanto a sibilancia, he escuchado mis típicas canciones de prueba como “Code Cool” y “Hope is a Dangerous Thing”, con ambas canciones siendo presentadas sin sibilancia ni brusquedad. De nuevo, los encuentro un poco más oscuros de lo que prefiero pero no es algo por lo que los descartaría.
La velocidad y definición de estos auriculares no es su punto fuerte y hay partes de canciones concurridas donde siento que el driver de 50mm lucha para mantener el ritmo pero, para ser justos, en esas canciones tampoco son mejores los M40x (de hecho, son perores) y los Custom Studio solo son ligeramente mejores.
En cuanto a anchura de escena, no son muy anchos pero tampoco demasiado íntimos. Para unos auriculares cerrados diría que son aceptables y por 100€, diría que son bastante buenos. La colocación de imágenes tampoco es espectacular pero es muy suave. Mientras no te permiten localizar la imagen al mm, la transición de izquierda a derecha en la canción de “Letter” es muy suave y no da la impresión de saltos.
Conclusión…
Los AKG K371 son unos auriculares que suponen seguir la curvatura Harman bastante de cerca, que es de esperar visto que AKG son propiedad de Harman (Samsung). La curva Harman es un afinado que se enfoca a ser agradable a la mayoría de los que escuchan, y puedo entender que los K371 sean justamente eso.
Para mis gustos personales, hubiera preferido bajar los graves un poco y añadir algo más en las zonas altas, haciendo que sonaran un poco más brillantes pero es que yo me canso de auriculares cálidos bastante rápido. No estoy diciendo que estos sean unos auriculares muy oscuros, solo que le falta un poco de brillo para mis gustos.
En comparación con los M40x, desde luego que los recomendaría por encima de la alternativa Audio Technica. Los K371 simplemente parecen mejores en general, todo se ha pulido un poco más. En comparación con los Custom Studio, seguramente seguiría optando por los Beyerdynamics si solo pudiera tener uno, pero la posibilidad de cambiar el afinado de los graves influye bastante en esa decisión.
Visto que los K361 supuestamente tienen menos graves, creo que los probaré para ver que opino de ellos en comparación con los K371, quizás se adapten mejor a mis gustos.
En fin, siento que los K371 son una buena opción para cualquiera que busca unos auriculares cerrados y portátiles para escuchas generalizadas y que no quieren gastar mucho dinero. Son unos buenos auriculares y serán del agrado de un gran porcentaje del público en general que los compre. Son una muy buena opción para los que buscan comprarles unos auriculares a alguien que no está muy metido en el mundo auricular.